La dependencia emocional o apego afectivo es una condición que padecen las personas que hacen lo que sea necesario para satisfacer a otra persona, aunque sea acosta de su propio sufrimiento. Su felicidad gira en torno a su pareja, sus amigos, incluso sus familiares. Este tipo de patología es sumamente peligrosa y por eso hay que ponerle fin cuanto antes. Con estos seis pasos lo conseguirás:
1. Dependencia emocional: Reconocer el problema
¿Necesitas la aprobación de los demás para sentirte bien contigo misma? ¿Sacrificas tu felicidad por la de otros? ¿Haces cosas que no te gustan para que no se enfaden contigo? Si tu respuesta a todas estas preguntas es afirmativa y además recuerdas varias situaciones en las que te han ocurrido todas estas cosas es que estás en peligro.
2. Dependencia emotiva: Identifica tu sufrimientoPonle nombre a las cosas que te han estado haciendo sufrir este tiempo. Reflexiona sobre tus actitudes y sobre las de los otros hacia ti. De esta forma lograrás darte cuenta de los sacrificios que has hecho por agradar a los demás dejando a un lado tu propia felicidad e incluso, tus propios intereses.
3. Dependencia emocional: Pide ayuda
Lo mejor que puedes hacer si sientes que padeces dependencia emocional de cualquier persona es acudir a un psicólogo. No hay que tener miedo. Este profesional te ayudará a lidiar y a superar tus problemas. Además, deberías hablar del tema con la persona sobre la que sientes esa dependencia. Puede que esté haciendo algo para atraerte de esa forma de manera inconsciente.
4. Dependencia emocional: Subidón de autoestima
Seguramente que te hayas dado cuenta ya a estas alturas de que tu problema viene porque no te valoras lo suficiente. Piensa en las cosas que te gustan, en lo que se te da bien. Si no se te ocurre nada, prueba diferentes actividades hasta que encuentres una que te guste. Ve progresando y verás como te valoras más. Cambiar de look o una tarde con tus amigas también pueden hacer milagros.
5. Dependencia emocional: Aprende a quererte
Si dependes emocionalmente de otras personas quizá debas pasar un tiempo sola, sin pareja o sin ver a aquellos hacia los que sientes ese apego afectivo. Dedícate a descubrir quién eres sin ellos y quiérete, quiérete mucho. Tienes muchas cosas buenas.
6. Establece relaciones saludablesAhora ya puedes retomar tus antiguas relaciones e iniciar otras nuevas pero siempre desde una perspectiva diferente a la que tenías antes. Tú debes ser tu prioridad, cuídate, mira por ti y después implícate con el resto.