María Teresa Campos está pasando un mal momento físico. Si en el amor le va viento en popa con su Bigote Arrocet, no puede decir lo mismo en temas de salud. La presentadora ha reconocido que va a tener que pasar por el quirófano para ser operada de la vesícula. Y será pronto, el próximo lunes. “Es el último día que me veis con vesícula. Ya tengo fecha para el quirófano. Pero no voy a dramatizar”, adelantó en Sálvame.
La salud de María Teresa Campos nos tiene preocupados. Y más aún después de que la pasada semana no acudiera a su cita semanal con Sálvame diario por problemas de salud. Pues bien, sus problemas le vienen de la vesícula, por lo que se tiene que operar para que se la quiten. Una operación que tendrá lugar el próximo lunes y donde estará presente su amor desde hace dos veranos, Bigote Arrocet.
“Es el último día que me veis con vesícula. Ya tengo fecha para el quirófano. Pero no voy a dramatizar”, afirmó la presentadora en el programa de Telecinco, que contó también cómo vivió el momento. “De pronto me puse muy mala y no sabía de dónde venía el dolor. Me asusté. Edmundo no estaba, llegaba al mediodía”. Posteriormente llamó a una amiga, que fue la que se encargó de avisar a la ambulancia para que acudieran a su casa.“El fin de semana ya estuve trabajando. Estoy ahora más recuperada. El susto y el dolor ha sido lo más desagradable”, afirmó.
Regreso al trabajo
Y ahora es el momento de pasar por quirófano. Algo a lo que no le tiene miedo. Su intención es trabajar el sábado y el domingo en ¡Qué tiempo tan feliz! e ingresar el mismo lunes para la operación. Si todo va según lo previsto, la presentadora recibirá el alta el martes. Aunque eso dependerá de lo que diga el médico y de cómo salga la operación. Seguro que a la matriarca de las Campos le viene a la cabeza lo mal que lo pasaron cuando su hija Terelu estuvo enferma.
Desde aquí queremos mandarle un fuerte abrazo a la Campos, y desearla que la operación salga de la mejor forma posible.