Manualidades niños: bolas de nieve para decorar. ¿Sabes en qué puedes reutilizar un tarro de cristal vacío? Muy fácil, para que tus hijos hagan una manualidad de lo más divertida, las famosas bolas que tienen en su interior una figura con agua y al darlas la vuelta comienza una nevada artificial. Estas bolas decorativas pueden hacerse durante todo el año, pero durante la época de navidad parece que las vemos más por los puestos de mercadillos, ya que al simular situaciones en las que está nevando, nos recuerda mucho a esta época en la que los primeros copos empiezan a caer. No lo dudes, este año divierte a tus hijos haciendo estas bolas de nieve para decorar su habitación en las fiestas.
Los tarros de cristal que tenemos en casa de la mermelada, las conservas, etc., pueden tener muchas más vidas después de gastar su contenido. Pueden servirte para hacer muchas manualidades con los más pequeños como jarrones decorativos de sal de colores, o para bolas de nieve como las que te vamos a enseñar a hacer hoy.
Materiales que necesitas
- Tarro de cristal con tapa que cierre bien.
- Figura decorativa.
- Pegamento térmico y super glue.
- Agua y glicerina.
- Purpurina o nieve en polvo.
Cómo hacer la bola de nieve paso a paso
- Lo primero de todo es elegir un tarro de cristal. Puede ser del tamaño y la forma que más te apetezcan, ya que lo único importante es que la tapa cierre bien.
- Después debemos elegir el muñeco o figura decorativa que queremos introducir en el interior. Debemos tener en cuenta su tamaño ya que tiene que entrar por la cavidad del tarro. Al estar en contacto con el agua, no puede ser de cualquier material, como un Papá Noel de fieltro por ejemplo, sino que éste debe ser de plástico, de cerámica o incluso puedes hacer uno tú misma fácilmente con plastilina y luego hirviéndolo para que se quede duro y aguante mojado.
- Una vez que tenemos la figura, que puede ser de motivos navideños o no, la pegaremos a la tapa del tarro con pegamento de pistola térmica o con super glue para que fije bien y no se despegue luego con el contacto con el agua. Este paso es conveniente que los niños lo hagan siempre con la supervisión de un adulto.
- Ahora llena el bote de agua y échale un poco de glicerina para que flote mejor la purpurina o la nieve en polvo que echarás a continuación. Recuerda no llenar el frasco del todo porque debe haber hueco para la figura.
- Por último, cogemos la tapa con la figura pegada y cerramos bien el bote. Si te quieres asegurar puedes echarle un poco de pegamento térmico para fijar.
¡Ya tienes tu bola de nieve decorativa! Pero si la quieres rematar, decora la tapa del tarro forrándola con algún papel bonito y así hasta podrá parecer que es comprada en una tienda.