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Gran Hermano 14: Miriam y Miguel anulan la boda. Durante la pasada noche del jueves, Gran Hermano vivió uno de sus momentos de más expectación, a causa de la llamada de Miriam a su prometido Miguel en directo, y como todos esperábamos, el chico la dejó bastante claro que no quería volver a saber nada más ni de su relación, ni por supuesto de la boda en julio. La peluquera no podía contener las lágrimas cuando escuchaba las palabras de su novio, pero momentos después junto a sus compañeros, ni corta ni perezosa, aseguró que iba a aprovechar el concurso, sin ninguna intención de salir para arreglar las cosas.
Desde que Miriam entró en la casa de Gran Hermano 14, todo pudimos ver que comenzó a sentir algo por su compañero Igor, a pesar de estar ultimando los preparativos de su próximo enlace con Miguel, su novio desde los 16 años.
Varias semanas más tarde, su relación con el vasco comenzó a volverse un poco más picante, entre besos, caricias e incluso un edredoning inesperado, del que sólo ellos saben lo que ocurrió bajo las sábanas, por lo que la audiencia ya se imaginó cuál sería la decisión de su prometido, y ella también, por lo que cuando el programa les obsequió con una llamada a un ser querido, Miriam llamó a su madre.
Pero su conversación con ‘Maik’ no se hizo esperar, y el pasado jueves todos pudimos ver cuáles fueron las palabras de Miguel, dejando claro que de su supuesto montaje, nada de nada: “Hola, Miriam. Te voy a decir un par de cositas. Lo primero es que con tu actitud y con todo lo que has hecho con una persona de la casa me has hecho muchísimo daño, que me has faltado al respeto y no sabes cuánto me duele. Me has demostrado que no eres la mujer de mi vida porque la mujer de mi vida no me haría lo que tú me has hecho y menos aún a punto de casarte”.
Tras estas palabras, Miriam afirmó a sus compañeros entre lágrimas: “Él tiene una decisión muy tomada y yo tengo decisiones tomadas ya. No puedo hacer nada porque esto parece que no tiene mucha solución así que yo voy a seguir disfrutando del concurso. Tendremos que hablar de muchas cosas porque tenemos una casa en común, perros en común…todo en común. Pero sabía que no me iba a entender”.
Miguel más tarde habló en el debate, y le dijo a Frank Blanco: “Estoy mal, jod…, porque esto no ha sido fácil. Quiero decir es que con esta llamada no he querido faltar el respeto a su familia que siempre me han tratado súper bien. He dicho lo que siento y pienso. Sinceramente, yo creo que esto no tiene solución. No le he dicho claramente que no hay boda porque creo que eso es algo que tendremos que hablar fuera”.
La peluquera por su parte, y tras haberlo pensado un momento, dijo a sus compañeros: «Lo que no mata te hace más fuerte. Yo me voy a quedar con lo positivo de la llamada, que mis perros están bien», añadiendo: «Ya no me voy a casar ni estoy con él».
Puede que el próximo lunes sea ella la que abandone la casa, y se enfrente a todos los errores que ha cometido durante su paso por esta edición.
