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Gran Hermano 14: Los concursantes castigados tras la fiesta de disfraces. Durante estos últimos días, los concursantes de Guadalix han podido disfrutar de una fiesta de disfraces en honor al cumpleaños de su compañera Saray, a quien hemos podido ver cada vez más cariñosa con Igor, mientras éste ha provocado los celos de Kristian, dándole un masaje en la espalda a Sonia en su presencia, durante su enésima pelea. Para su sorpresa, la organización se ha cansado de su desorden y su falta de actividad, y ha decidido cerrar una de las habitaciones de la casa como castigo.
El pasado martes, los ánimos entre los concursantes de Gran Hermano 14 ya estaban mucho menos caldeados, y es que tras superar la prueba musical, por fin pudieron hacer la compra, además de disfrutar de una fiesta de disfraces con tarta incluida, para celebrar el cumpleaños de Saray, donde los chicos, como viene siendo costumbre, bailaron su particular ‘Full Monty’ ante la atenta mirada de las féminas.
Tras la juerga, por supuesto y como no podía ser de otra forma, Kristian y Sonia, los protagonistas del primer edredoning, tuvieron una pelea de enamorados por enésima vez, y es que la canaria malinterpretó una gracia de su chico, y le dijo: «Me estás hablando superborde y yo no te he hecho nada. Vale ok, quédate solo. Estás mejor solo que conmigo».
Pero esto no ha sido todo, y es que tras la disputa, Sonia ha dejado que le dé un masaje en la espalda Igor, ante los ojos de Kristian, y esto ha sido la gota que ha colmado el vaso: «No soy gilipollas. Me siento culpable, porque habla con todos, con uno, con todos. Yo también tengo fallos, pero no soy el culpable de todo. Son cosas de los dos y yo no lo hablo con toda la gente de lo nuestro. La miro y pone cara de mala hostia, tiene más orgullo de lo que pensaba. He intentado hablar con ella, pero ella no», le confesaba a Raky.
A pesar de todo, el ‘pelocho’ no se dará por vencido: “Ayer en la radio dijo que en el amor un clavo saca a otro clavo. ¿Eso a qué viene? A lo mejor se ha dado cuenta de que no soy compatible con ella. Voy a luchar».
La organización por su parte, ha decidido tomar medidas para cambiar el estilo de vida que están llevando los habitantes de Guadalix, y el ‘súper’ ha reunido a todos para echarles una buena reprimenda: “Da la sensación de que pensáis que estáis de fiesta y la fiesta se acabó”, añadiendo: “Os queremos activos. No venís a estar tirados en el sofá. No nos gusta la pereza”, además de comunicarles que los micros que rompan los tendrán que pagar, y prohibirles repartir los alimentos y usar las paredes como murales, además de cerrar una habitación con todas sus cosas durante 30 horas.
Argi por su parte, pretende comprarse su maquillaje robado en Guadalix con el presupuesto semanal, algo con lo que muchos no están de acuerdo, mientras Desi sigue sin confesar su delito.
Tendremos que esperar para saber cómo termina todo, y saber si las cosas terminan solucionándose.