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Una vez que hemos forrado los libros de texto para el nuevo curso escolar, conviene que incluyamos una etiqueta con el nombre del niño/a y el curso o número de clase. De esta manera, en caso de pérdida, será mucho más fácil localizarlo. Las etiquetas para libros escolares no solo son prácticas, sino que también son una manera de personalizar el material escolar. Puedes colocarlas en los libros y en los cuadernos, ya que como podrás comprobar en la galería de imágenes que hemos seleccionado, hay un montón de diseños y modelos para elegir. Más allá de las clásicas etiquetas blancas, podemos elegir entre un amplio catálogo. Tan sencillo como elegir las que más te gustan e imprimirlas.
Si te gusta diseñar tus propias creaciones, con un poco de imaginación podemos hacer nuestras propias etiquetas. Otra opción, más rápida y práctica, es elegir entre los modelos que podemos encontrar ya listos para imprimir, rellenar con el nombre del niño o niña y pegar en los libros y cuadernos. Algunas etiquetas ya incorporan papel adhesivo, sino es tan sencillo como recurrir al pegamento o a la cinta adhesiva para sujetar las etiquetas en la cubierta del libro. Un consejo más: conviene elegir un mismo diseño para todos los libros, ya que de esa manera serán reconocibles a simple vista. Si utilizamos una etiqueta diferente para cada libro será más complicado para los niños más pequeños identificarlos sin mayores problemas.
Etiquetas de fondo blanco o de color con dibujos de personajes, de animales, de paisajes, de superhéroes… un montón de opciones para personalizar los libros de texto y empezar a preparar la mochila para la vuelta al cole.
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