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Desde los marcos de las fotos a los cubiertos y, por supuesto, las joyas. La plata es un material tan apreciado como utilizado. No todas las piezas de plata las utilizamos a diario o, al menos, no incidimos en su limpieza todos los días. Si, por ejemplo, tenemos una serie de piezas decorativas en plata -pequeñas bandejas, floreros u otros detalles-, además de pasar el plumero a diario para retirar el polvo, de manera ocasional podemos acometer una limpieza más en profundidad. ¿Cómo limpiar y pulir la plata? [/multipage]
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1. Retirar el polvo
Lo primero es eliminar cualquier resto de polvo ayudándonos con un paño de algodón limpio. También es eficaz lavar la plata con agua tibia y jabón, sobre todo si la pieza presenta restos de grasa o está muy sucia debido a que ha estado en un lugar poco apto. Secar bien con un paño. Conviene utilizar guantes de goma para estas tareas. [/multipage]
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2. Pulir
Además de productos específicos, también contamos con algunos trucos caseros, naturales y baratos. Para pulir los cubiertos, por ejemplo, mezcla bicarbonato y pan rallado hasta conseguir una pasta seca con la que frotar el objeto de plata. A continuación, pasar un paño de algodón seco. [/multipage]
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3. Bicarbonato de sodio
Uno de los trucos caseros más conocidos para limpiar la plata. Lo mejor es mezclar con agua hasta conseguir una pasta ligera (tres parte de bicarbonato por una de agua). Aplica la mezcla suavemente sobre el objeto de plata con ayuda de un paño de algodón limpio. Después, enjugar la pieza con agua y secar bien hasta eliminar cualquier resto. [/multipage]
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4. Pasta de dientes
La pasta de dientes tiene muchos usos, algunos poco conocidos, como el de ser eficaz para limpiar los objetos de plata. Basta con poner un poco de pasta de dientes en un poco de algodón y frotar la pieza. Luego, enjuagar con agua y secar bien la pieza con un paño de algodón para no dejar ningún rastro. [/multipage]
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5. Agua con sal o limón
Otro truco de la abuela eficaz para limpiar la plata. En este caso, basta con disolver una cucharada de sal en agua y dejar en remojo los objetos de plata durante una hora. También podemos usar zumo de limón con una cucharadita de bicarbonato para pulir y dejar los objetos como nuevos. Aclarar con agua y secar bien las piezas. [/multipage]
