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Sin duda Kate Middleton ha devuelto a la corona británica todo su esplendor. Cada paso que da la duquesa es seguido con lupa. Kate ha evolucionado en estilo y popularidad. Con el tiempo Kate ha encontrado su sitio tanto en la realeza como en sus estilismos, muchos de ellos con marcas low cost que la han acercado al público. Su estilo es uno de los más copiados y alabados.
A Kate Middleton siempre le ha interesado la moda, aunque no de una manera excesiva. En el año 2002 desfilaba con ropa de un diseñador amigo suyo, cuentan que en ese momento Guillermo se enamoró de ella. En los años posteriores su estilo reflejaba la moda de la época, pero siempre con un punto demasiado clásico. Con los años ha ido depurando sus estilismos para darles una aire más actual. A partir del año 2005 la vemos un poco más suelta en sus looks. Por ejemplo con un vestido cruzado de lunares rojos que destaca su figura. No es raro verla con vestidos de la marca TopShop durante esos años. En algunas apariciones públicas, Kate apuesta por trajes chaqueta impecables, pero un poco anticuados.
En el año 2007 Kate y Guillermo rompen y se nota en su vestuario porque vuelve otra vez a un estilo mucho más recatado y soso. A partir del 2008, cuando la pareja vuelve, se nota un cambio asombroso. Kate se esmera en sus apariciones con vestidos espectaculares como un vestido rosa drapeado de fiesta de la marca Issa que lució en dicho año. La futura princesa cada vez se ve en más actos y demuestra que las marcas de gama media son sus favoritas… como Reiss. También destacamos el humor de Kate al acudir a una discoteca con unos mini shorts y un top de lentejuelas, suponemos que iba a una fiesta de disfraces.
A partir de 2009 la vemos acompañar a Guillermo a muchas bodas, donde Kate nos muestra su lado más británico con modelos de traje chaqueta o abrigo en colores vivos y por supuesto, con sombrero o tocado incluido. En noviembre de 2010 se anuncia su compromiso y Kate nos dejó a todos enamorados de su vestido drapeado azul klein de Issa. A las pocas horas el vestido se agotó en las tiendas. A partir de ese momento el estilo de Kate se va haciendo más elegante y un poco más moderno. Los abrigos y trenchs son una de sus prendas favoritos, repite los modelos y añade nuevos a su vestuario.
En abril de 2011 llega el gran día de la boda y Kate luce en todo su esplendor un vestido preciosos de encaje creado por Sarah Burton para Alexander McQueen.
Kate es bastante asidua a mezclar prendas low cost de Zara con ropa o complementos de marcas de lujo. No es nada raro verla repetir modelo. En sus visitas oficiales apuesta por diseñadores como LK Bennett y para los estilismos de noche por Jenny Packham. En sus apariciones nocturnas siempre luce perfecta. Durante su embarazo Kate siguió con su estilo elegante, atemporal y refinado.
Sin duda en los últimos tres años Kate encuentra su sitio en el mundo de la moda y sus estilismos cada vez son más ideales, como pudimos comprobar en su viaje oficial a Nueva Zelanda y Australia.