La otitis infantil es uno de los problemas a los que deben enfrentarse la mayoría de los niños, especialmente los bebés de entre 6 y 18 meses que no han podido desarrollar aún su sistema inmunológico. Los pequeños deben soportar un dolor molesto en el oído que puede provocar otros síntomas secundarios. Como madres debemos aprender a identificarla y actuar de inmediato para evitar que el problema vaya a más y tenga graves consecuencias para nuestro hijo. Te contamos todo lo que debes saber sobre la otitis infantil.
¿Qué es la otitis infantil?La otitis infantil es una inflamación del oído causada por una infección bacteriológica. Puede afectar tanto a la parte externa del oído como a la media, siendo más común la última en invierno y climas fríos.
Síntomas frecuentesAunque depende de la edad, los síntomas más comunes son dolor intenso de oído, fiebre, irritabilidad y malestar general. Normalmente viene acompañado de pérdida de apetito, dificultad para dormir y vómitos. En los casos más graves puede apreciarse también la aparición de pus en los oídos.
CausasLa otitis suele estar provocada por bacterias que se introducen por el oído, la nariz o la garganta, ya que los tres están interconectados. La mucosidad es una de las causas que fomenta su aparición, y es que impide que estos conductos puedan limpiarse por completo y se acumulan pequeños gérmenes que derivan en una infección. Es por esto que es común que la otitis aparezca junto a resfriados o vegetaciones.
Por lo general, la otitis infantil es idéntica a la que se experimenta en una etapa más adulta, pero con la diferencia de que en bebés su frecuencia aumenta considerablemente. Esto se debe a las características anatómicas de su oído, ya que es mucho más corto y las bacterias tienen un acceso más cómodo al interior.
Además, la genética también es un factor determinante, y es que la frecuencia de infección suele ser hereditaria.
TratamientoEl tratamiento más común es el antibiótico para niños menores de dos años, siendo la amoxicilina con ácido clavulánico lo más recetado. El tratamiento suele durar unos diez días, pero este tiempo depende enteramente de las indicaciones del pediatra y del antibiótico recetado. En el mejor de los casos puede que sólo necesite de unas gotas antiinflamatorias para desaparecer.
Es habitual que este tratamiento venga acompañado de analgésicos para aliviar el dolor y tratar la fiebre, como puede ser el ibuprofeno o el paracetamol. Esto hará que en 48 horas el pequeño se sienta mucho mejor.
También puedes paliar un poco el malestar con algunos remedios naturales para la otitis, como puede ser aplicar calor calentando una toalla en el microondas o aplicando un poco de aceite de oliva en la misma.
PrecaucionesAunque lo mejor es contar con una sólida prevención, si sospechas que tu hijo puede tener una otitis debes llevar una serie de precauciones para que no vaya a más. Lo primero es evitar que se bañe en piscinas, ya que el cloro empeorará la infección y aumentará su malestar. Además, está desaconsejado hacer cualquier tipo de intervención en sus oídos, especialmente aquellas que requieran de ejercer presión o introducir bastoncillos para limpiarlos.
No debes ignorar los síntomas, ya que de no tratarlo a tiempo puede llegar a formarse una acumulación de pus que perfore el tímpano y salga al exterior. El niño siente una ligera mejoría en cuanto a la fiebre y al dolor, pero la infección no habrá desaparecido. Deberás llevarlo inmediatamente al médico para tratarlo, ya que sólo de esta manera podrá cicatrizar esta nueva herida.
Por último, no deberás interrumpir el tratamiento aunque el dolor y la fiebre hayan cesado, ya que ambos podrían reaparecer de forma más intensa y derivar en un caso crónico. De tratarlo correctamente, la frecuencia de aparición de las otitis irá disminuyendo a medida que crezca tu hijo y te olvidarás de este tipo de infecciones durante mucho tiempo.