Los juegos educativos con palabras son todo un clásico. A buen seguro que los papás y mamás también recuerdan haber disfrutado de los juegos más conocidos, como las sencillas adivinanzas o el Veo Veo. Juegos con las palabras como protagonistas, aunque también tenemos la opción de sacar lápiz y papel para hacerlos un poco más complejos. Vamos a ver, a continuación, algunas propuestas de divertidos juegos para los niños. Ideas para poner en práctica en una tarde en familia o para entretener y hacer más corto un viaje en coche.
Juegos para hacer en voz alta La lista de juegos para jugar en la familia, pero también con los amigos, con la ayuda de mamá y papá, o simplemente con sus compañeros, además de larga, es perfecta para ayudar a los niños a familiarizarse con el lenguaje, descubrir nuevas palabras, desarrollar sus habilidades lingüísticas y de interiorizar nuevos sonidos.
Tenemos, por ejemplo, el juego de sinónimos y antónimos, en el que un participante dice una palabra y el otro debe adivinar al menos un sinónimo y una palabra opuesto. Otra opción es el juego de la ortografía o la separación de sílabas, perfecto para que el niño aprenda a distinguir las letras o sílabas que componen una palabra.
También tenemos el juego de las palabras encadenadas. El primero dice una palabra y el siguiente debe decir otra otro utilizando su última sílaba, como en una especie de cadena. El que falla, se cae de la cadena, y así sucesivamente hasta que solo quede un ganador.
Más posibilidades con juegos de palabras que implican, por ejemplo, encontrar palabras o nombres que aludan a cosas o personajes con características particulares. Así, por ejemplo, podemos pedir a los participantes que encuentren los nombres de todos los frutos rojos o todas las princesas de los cuentos de hadas que tienen el nombre que comienza con una consonante en particular.
El conocido juego como el Veo Veo consiste en adivinar una palabra a base de preguntas. Uno de los participantes elige una palabra que defina algo que tiene a la vista (un objeto, una animal…), y el resto tendrá que ir haciendo preguntas hasta adivinar de qué se trata.
Juegos con lápiz y papel Con dos cosas tan básicas como papel y lápiz, podemos poner en práctica muchos juegos educativos que tienen como protagonistas a las palabras y que tienen sus raíces en la infancia de los padres de hoy en día o tal vez incluso antes.
Tenemos el conocido juego del ahorcado que, a pesar de su desafortunada definición, es un divertido juego para entretener a los niños, animarles a pensar, a sentir curiosidad y aprender nuevas palabras. Uno de los niños elige una palabra y escribe solo la letra inicial y la final, especificando la longitud de la palabra (número de letras). El resto de los niños tienen que tratar de adivinar las consonantes o vocales que faltan y, a continuación, encontrar la palabra, pero cada error puede costar muy caro porque se irá dibujando una de las partes del dibujo del ahorcado. El objetivo es encontrar la palabra antes de que se complete el dibujo del ahorcado.
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