Con la llegada del calor todos los niños sueñan con sus ansiadas vacaciones, en las que planean jugar sin parar y descansar todo lo que puedan. Sin embargo, es importante que dediquen algún tiempo a los deberes de verano, los cuales les ayudarán a refrescar los conocimientos que han ido adquiriendo durante todo el curso escolar. Te contamos cuántas horas debe dedicar tu hijo cada día al estudio.
Deberes de veranoLos niños se esfuerzan durante todo el curso en la escuela y no siempre es de su agrado tener que hacer deberes también en vacaciones. Ya no sólo demandan un descanso mental, sino que todas las actividades veraniegas, el calor y la ausencia de colegio hace que pierdan el ritmo y les cueste mucho más sentarse en la mesa a estudiar. No obstante, es importante que refresquemos su memoria para que no olviden todo lo que han aprendido durante el año y sepan aplicarlo correctamente. Para ello debemos hacer que nuestro hijo no perciba sus deberes como una obligación, sino como una actividad veraniega más aunque, eso sí, mucho más tranquila que el resto.
Cuántas horas dedicar según su edadLa edad de tu hijo es muy importante para determinar cuántas horas deberá estudiar, ya que las tareas que realizan y sus capacidades son completamente distintas entre sí.
Hasta los 6 años los niños son muy pequeños y tan sólo buscan jugar y pasarlo bien. En edades tan tempranas lo más recomendable es convertir sus deberes en divertidos juegos y canciones para que se diviertan a la par que memorizan y recuerdan todo lo asimilado. Con esto, puedes emplear una media de 2 horas a diario, que tu pequeño ni se enterará.
De los 7 a los 10 años no requieren de largas horas de estudio, ya que tienden a desconcentrarse con mayor facilidad y obligarles les provoca un gran estrés. Lo mejor es que le dejes disfrutar al máximo sus vacaciones y aproveches en los ratos en los que el calor no os permita salir de casa. Durante estas horas de sol intenso podréis refugiaros en casa y sentaros a leer un libro, practicar matemáticas de una forma divertida o perfeccionar la ortografía, lo cual os llevará en total un par de horas en total.
Los niños mayores de 10 años ya comienzan a concentrarse durante más tiempo, por lo que esta edad es ideal para pedirles que se sienten a hacer sus tareas y que comprendan que es su responsabilidad acabarlas. Según van creciendo pueden ir dándose algunos suspensos, por lo que es muy importante inculcar este sentido del deber e indicarles que deberán estudiar, como mínimo, una hora y media, ya que son capaces de concentrarse más. Eso sí, siempre tratando de convertir los deberes en una actividad amena y divertida, ya que en caso contrario no sólo no aprenderán, sino que sentirán rechazo a todo lo relacionado con estudiar.