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Virginia Raggi es una abogada y política italiana miembro del Movimiento 5 Estrellas. El 19 de junio de 2016 pasará a la historia de Italia pues ganó las elecciones municipales convirtiéndose en la primera mujer que asume la alcaldía de Roma. Un honor que le ha convertido en portada de periódicos y en uno de los temas más comentados en redes sociales. Algunos le acusan de populista, otros de antisistema, pero lo que está claro es que es todo un nuevo logro para la mujer.
Parece que se está viendo que lo de poner a una mujer al frente de la política no está yendo nada mal. Si la semana pasada supimos que Hillary Clinton será la candidata demócrata para la Casa Blanca en Estados Unidos, ayer las urnas hablaron en Italia y dijeron que Virginia Raggi será su próxima alcaldesa, o lo que es lo mismo, la primera mujer que estará al frente de los romanos en toda su historia.
Muy preparada
La candidata del Movimiento 5 Estrellas (M5E) ha conquistado Roma de forma arrolladora, con el 67,2% de los votos, frente al 32,8% de su rival, el candidato del Partido Democrático (PD), Roberto Giachetti. Como jurista es especialista en derechos de autor, propiedad intelectual y nuevas tecnologías, así que es una mujer que está a la última. En 2011 se unió al Movimiento 5 Estrellas y constituyó el grupo del Municipio XIV (Roma), con el que ahora ha llegado a lo más alto. Entonces se especializó en cuestiones educativas y vinculadas con el medio ambiente. Está implicada con mercados biológicos y grupos de compra solidaria, que la acercan a un perfil más de izquierda.
Raggi ha dicho que en las elecciones «han ganado los ciudadanos de Roma», a los que ha dado las gracias por respaldar su candidatura». «Diría que es un momento histórico para Roma». Aquí la puedes ver durante uno de los debates realizados durante la campaña, donde se mostró con una gran dialéctica y poder de convicción.
En España tenemos muchas mujeres poderosas en puestos de responsabilidad, incluso alcaldesas en las dos ciudades más importantes, pero todavía nos queda ese paso, en el que una mujer se presente para candidata al Gobierno. Aunque estamos seguros de que no le iría nada mal a este país, y menos aún, visto lo visto.
