Raquel Mosquera: ingresada de nuevo por un brote psicótico. Esta ha sido la cuarta vez que la viuda del boxeador Pedro Carrasco ha tenido que ser ingresada por una crisis. Raquel Mosquera acababa de regresar de rodar un reality en Marruecos, cuando se empezó a encontrar mal, y finalmente tuvo que ser ingresada en el hospital Puerta de Hierro de Madrid, a pesar de que se baraja la posibilidad de que la trasladen en unas horas a la clínica López Ibor de la capital donde ha estado interna en varias ocasiones, e incluso ha llegado a atentar con su vida. Esperamos que se recupere pronto.
Desde que Pedro Carrasco falleciera el pasado año 2001, su viuda Raquel Mosquera, no ha levantado cabeza, y a pesar de que se casó de nuevo con el nigeriano Tony Anikpe en 2005, su matrimonio fue un fracaso y dos años después decidieron separarse.
Hace pocos días, la peluquera regresó del rodaje de un reality en Marruecos llamado ‘Expedición Imposible’, conducido por Raquel Sánchez Silva, la presentadora que contrajo matrimonio este verano en Sicilia con Mario Biondo, al ser expulsada junto a su compañera Leticia Sabater, cuando de repente comenzó a sentirse muy mal.
Raquel Mosquera acudió al chalet que ostenta en Galapagar, y su hermano, al ver el estado en que se encontraba, decidió llamar al 112 para pedir ayuda.
Un médico de urgencia se trasladó hasta el domicilio de Raquel, y al diagnosticar su estado, decidió pedir una ambulancia psiquiátrica, donde la trasladaron al hospital Puerta de Hierro de Madrid, y fue ingresada hacia las 2 de la madrugada.
La viuda del boxeador estará ingresada en observación durante un tiempo, y cabe la probabilidad de que la trasladen más adelante a la clínica López Ibor de la capital, donde ya ha estado interna en otras ocasiones.
Este es el cuarto episodio de este tipo que sufre Raquel Mosquera, al haber tenido que ser internada por primera vez en 2006, a causa de un grave ataque de ansiedad por las discusiones con su ex marido y la depresión postparto, cuyos síntomas y tratamiento están a la orden del día, una segunda ocasión en agosto del pasado 2008, tras haber sido ingresada en el Gregorio Marañón, y la tercera y más grave de todas en noviembre de ese mismo año, al haberse tomado un bote de pastillas e intentar cortarse las venas.
Esperamos que esta ocasión tan sólo se quede en un susto, y que Raquel Mosquera pueda regresar pronto a su casa para disfrutar de su familia y de su hijo, quienes la han ayudado mucho a salir poco a poco de la depresión en la que estaba sumergida.
