La trágica muerte de Paul Walker sigue despertando interés. Aunque ocurrió hace ya dos años, todo lo que está relacionado con ella se convierte en viral. Lo último, un vídeo grabado unos meses antes de morir donde se puede comprobar su destreza como piloto. Se ve cómo Walker pone a prueba una modificación del supercoche Mine’s-R35 GT-R y reacciona con entusiasmo mientras lo conduce a una velocidad muy, pero que muy, elevada.
Un año antes de su fallecimiento en un accidente, el actor Paul Walker realizó un viaje Japón acompañado del canal GTChannel para probar el Nissan R35 GT-R, una experiencia que había sido grabada, pero que nunca había salido a la luz, por respeto a la familia. Aunque según la empresa se habían perdido. Pero ya se sabe que lo que no se lleva el ladrón aparece en un rincón. Y así ha pasado.
En el documento, se puede ver a Paul Walker a los mandos del Nissan R35 GT-R, disfrutando mucho de la conducción, demostrando su vitalidad y su habilidad para pilotar. «Es como música para mis oídos», dice al pisar el acelerador y oír el rugido del motor. Y es que el actor de Fast and The Furius era un amante de la velocidad.
Herencia millonaria para la hija GTChannel ha anunciado que todos lo recaudado con el video se donará a la Fundación Paul Walker que la hija creó luego de su trágica muerte. La publicación viene al cuento ya que la hija del actor ha obtenido casi nueve millones de euros de la herencia de Roger Rodas, el amigo de su padre que conducía el coche en el fatídico momento del accidente mortal al entender que era culpable parcial del accidente.
Una cantidad que, según el abogado de la chica, «solo cubre parte del dinero que Paul Walker habría obtenido si su vida no se hubiera interrumpido trágicamente». Así pues, nos quedamos con este vídeo como un recuerdo. Eso sí, te avisamos que esto de la velocidad es en los coches, no es juego ni una afición. En España también hemos tenido casos. Mucho cuidado al volante.
