Lindsay Lohan: se niega a ingresar para rehabilitarse. La actriz Lindsay Lohan parece una adolescente rebelde que se niega a hacer caso de los consejos que le dan su padre y sus amigos. Mucha gente de su alrededor, que la aprecia y quiere lo mejor para ella, están tratando de hacerle entender que lo mejor es que se interne en un centro para acabar con su adicción al alcohol. Ella dice que no necesita nada de eso, que está perfectamente, y a pesar de lo que le recomiendan sus seres queridos, y que esto la podría beneficiar ante el último altercado que ha tenido con la justicia, no quiere entrar en razón y parece que no va a permitir que la encierren en ningún sitio.
Hace unos días Lindsay Lohan volvió a ser arrestada por un altercado que tuvo con una mujer, a la que agredió, en una discoteca de Nueva York, por lo que se enfrenta, una vez más, a la justicia. Pero a esto se le debe añadir un problema más, su adicción por el alcohol, ya que dicen que se bebe dos botellas de vodka al día.
Su padre, según ha informado a HollyScoop.com, ya ha intentado por todos los medios que se ingrese en la clínica Betty Ford y que se rehabilite, ya que es su hija y como tal, la quiere y lo único que desea es ofrecerle la ayuda que necesita. Pero sus intentos han sido fallidos ya que su hija no quiere saber nada de él, tras enviar a los medios de comunicación la pelea que la actriz tuvo con su madre por cuestiones de dinero, y durante la cual la acusó de depender de la cocaína. Lindsay Lohan no perdona a su padre y ha dicho que para ella estaba muerto.
Como su padre no ha conseguido que entre en razón, según el portal TMZ, son ahora sus amigos más cercanos los que están intentando que entre en razón y quieren convencerla de que se someta a un tratamiento de desintoxicación. Pero la actriz se defiende con el argumento de que acaba de rodar tres películas y que eso demuestra que no tiene problemas con el alcohol. Una de estas interpretaciones es la de Elizabeth Taylor en “Liz & Dick”, la cual ha sido duramente criticada.
Además, el someterse a un tratamiento de este tipo la ayudaría en su defensa ante el juez, en relación a la cuenta que tiene pendiente por la pelea de la discoteca. En el último arresto que tuvo por atropello y fuga consiguió salir airosa de la situación, y la detención duró solo unas horas, pero esta vez puede que no sea así y que el juez la declare culpable.
No es la primera vez que Lohan se encuentra en una situación así, ya que sabe bien lo que es estar en la cárcel; y como continúe sin hacer caso de las recomendaciones de sus allegados, la cosa puede volver a terminar mal para la actriz.
