Conseguir un vientre plano en tan solo una semana es posible, con una dieta para perder volumen y eliminar toxinas. Una dieta específica que, además de ayudar a deshincharte y a sentirte mejor, nos aportará todos los nutrientes esenciales. La retención de líquidos se puede controlar con una dieta adecuada y ejercicio físico. El vientre hinchado, la hinchazón de manos y la pesadez de las piernas son tres síntomas inequívocos de que estamos reteniendo líquidos, y eso influye a la hora de pesarnos, pudiendo ganar entre dos y tres kilos.
¿Cómo conseguir un vientre plano en tan solo una semana? Es posible, te damos las claves, con una dieta sencilla, variada y que, en 7 días, te ayudará no solo a perder volumen y eliminar toxinas, sino a sentirte mucho mejor. La retención de líquidos es un problema que puede ir asociado a la ganancia de peso, entre dos y tres kilos. Tan importante como seguir una dieta adecuada es adoptar otros hábitos saludables, como el de beber más agua. Precisamente, dejar de ingerir agua es un error, ya que si no tomamos suficiente líquido, nuestro organismo tiende a retenerlo para cumplir con sus funciones. Es aconsejable beber, al menos, litro y medio de agua al día (mejor de baja mineralización).
La sal también es un enemigo que favorece la retención de líquidos. Lo aconsejable es no superar los 5 gramos de sal al día. El exceso de sal puede provocar dificultades al organismo para expulsarla, lo que contribuye a la retención de líquidos y aumenta nuestra vulnerabilidad a padecer problemas de hipertensión arterial.
Vientre plano: Dieta 7 días
Toma nota de la dieta ideal y olvídate de la retención de líquidos. Resultados, en tan solo siete días.
Lunes
- Desayuno: Infusión diente de león, cereales integrales con frambuesas y yogur desnatado.
- Comida: Ensalada con arroz integral, conejo asado con calabacines y granizado de sandía.
- Cena: Gazpacho, tortilla de champiñones y ciruelas.
Martes
- Desayuno: Infusión de té verde, tostada integral con tomate y queso fresco.
- Comida: Garbanzos con cuscús y verduras, brocheta de melón, pera y melocotón.
- Cena: Cogollos de lechuga con verduras, boquerones asados y paraguayas.
Miércoles
- Desayuno: Infusión de té rojo, medio sándwich integral con pechuga de pavo, zumo de pera y melón.
- Comida: Berenjena asada rellena con tomate, dorada al horno y nectarinas.
- Cena: Ensalada con pepino, revuelto de champiñones y sandía.
Jueves
- Desayuno: Infusión de diente de león, cereales integrales con arándanos y leche desnatada.
- Comida: Ensalada de pasta y verduras, muslitos de pollo con puerros y melocotón.
- Cena: Crema fría de calabaza, cebolla y patata, lenguado al vapor y plátano.
Viernes
- Desayuno: Infusión de té verde, tostada integral con requesón y ciruelas.
- Comida: Ensalada verde con tomate, lomo de salmón con arroz integral y melón.
- Cena: Crema de verduras (puerro, apio, patata), pavo a la plancha con pimientos y paraguayas.
Sábado
- Desayuno: Infusión de dente de león, minibocadillo integral con tomate y queso fresco, pera.
- Comida: Ensalada de alubias y verduras, solomillo y yogur desnatado.
- Cena: Judías verdes con patatas y tomate, palometa en salsa verde y ciruelas.
Domingo
- Desayuno: Infusión de té verde, cereales integrales con frambuesas.
- Comida: Ensalada con melón y nueces, fideuá de pescado y sorbete de sandía.
- Cena: Verduras a la parrilla, huevo al plato con guisantes y tomate, yogur desnatado.
Picoteo entre horas
A media mañana, para completar la dieta y para picar entre horas, podemos tomar fruta, galletas integrales, yogur desnatado con un puñado de frutos secos. Para la merienda, cuajada con frutos secos o galletas integrales.
