Sobrepeso: Antesala de la obesidad. No se trata de un problema estético, sino de salud. El exceso de peso, provocada por el aumento de grasa, puede poner en riesgo nuestra salud. Un exceso de peso que, según datos médicos, afecta cada vez más a la población, independientemente de la edad. El sobrepeso no aparece de un día para otro, por lo que debemos mantener los hábitos saludables y cuidar nuestra alimentación a lo largo de toda la vida. Prevenir es invertir en salud.
La causa más frecuente del aumento de peso es un desequilibrio entre la ingesta de calorías y las que necesitamos o gastamos. El exceso de calorías provoca la acumulación de grasa. No hay que olvidar que algunas personas son más vulnerables al aumento de peso. Además, factores como el estrés, situaciones de cambio o menopausia pueden favorecer el aumento de peso.
Diabetes, hipertensión, trastornos cardiovasculares, apnea del sueño, artrosis, problemas psicológicos son algunos de los riesgos asociados que pueden entrañar para nuestra salud, pero no los únicos. De hecho, hay otros problemas de salud que se pueden ver agravados por el exceso de peso, como la hernia de hiato, problemas de infertilidad o riesgo elevado de diabetes gestacional durante el embarazo. El sobrepeso también reduce la calidad de vida.
Para mejorar nuestros hábitos y prevenir los riesgos de padecer sobrepeso, la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, SEEDO, nos brinda algunos sencillos consejos:
- ¿Qué comes y cuánto? Una dieta variada, equilibrada es garantía de salud. Apostar por los productos naturales y de temporada, sin exceso de grasas. Lo más aconsejable es tomar raciones moderadas. Alimentos como galletas, bollerías, fritos o precocinados presentan lo que se denomina una alta densidad energética, es decir, un alto contenido en azúcares y grasas.
- ¿Qué bebes? La hidratación (6-8 vasos de agua al día) también juega un papel esencial, evitando las bebidas azucaradas y moderando el consumo de bebidas con alcohol.
- Fruta y verduras, fuente esencial de nutrientes y básicos en una dieta sana y equilibrada. Su bajo contenido en calorías es otro argumento a tener en cuenta. Lo más aconsejable es tomar cinco piezas de frutas y verduras al día. Las ensaladas, en comidas y cenas.
- ¿A qué hora comes? Mantener los horarios y la distribución de comidas es esencial. Es decir, programar y planificar los menús. Es muy importante no saltarse comidas, sobre todo el desayuno, la comida más importante del día. A la hora de sentarnos a la mesa, comer con tranquilidad y evitar las situaciones de estrés.
- Comer fuera de casa no tiene por qué ser un problema. Optar por ensaladas, verduras, legumbres y alimentos a la plancha, evitando los aliños y salsas que elevan las calorías de los platos. De postre, la mejor opción, fruta de temporada.
- Ejercicio físico. Media hora al día de ejercicio físico nos reporta beneficios para nuestro cuerpo y nuestra salud. El ejercicio físico no solo ayuda a evitar los problemas de sobrepeso u obesidad, sino también a mantenernos activos y a proteger nuestra salud de otros problemas. Sube las escaleras en lugar de coger el ascensor, realizar actividades que nos gusten (bailar, patinar, entre otras), pasear son algunas sencillas formar de mantenernos más activos.
- Cuidar el sueño y el descanso, no en vano, la falta de sueño puede aumentar los riesgos de sobrepeso. De la misma manera, el estrés nos puede hacer comer en exceso. Para evitar el estrés, ejercicios de relajación.
Los problemas de peso pueden ser crónicos, por lo que debemos mantener los hábitos saludables a lo largo de la vida es la mejor manera de prevenirlos.
Sobrepeso: Índice de Masa Corporal
Es una de las formas de medir si tenemos sobrepeso. El Índice de Masa Corporal (IMC) se calcula dividiendo el peso (kilos) entre la altura al cuadrado. Si el resultado se sitúa entre los 18,5 y 24,9, tenemos un peso normal, pero si supera estas cifras empiezan los riesgos de sobrepeso (entre 25 y 29,5), obesidad (entre 30 y 39,9) y obesidad mórbida (por encima de 40). Por el contrario, si estamos por debajo de los 18,5, podemos tener un problema de bajo peso o infrapeso, el cual también debemos vigilar.
Otra formar de saber o medir si tenemos sobrepeso es con el perímetro de la cintura. La acumulación de grasa en la zona abdominal aumenta los riesgos de diabetes, hipertensión, colesterol o de los niveles de triglicéridos, entre otros. En las mujeres, un perímetro de menos de 80 es lo normal, por encima de los 80 centímetros aumentan los riesgos.