Salud cardiovascular: ¡Cuidado con lo que comes! La Red Europea del Corazón alerta sobre el aumento de las enfermedades cardiovasculares, incremento de la prevalencia en la que tienen mucho que ver el no llevar una dieta sana y equilibrada y no practicar de manera habitual ejercicio.
El corazón es el motor de nuestro organismo, por lo que debemos prestar especial atención a su cuidado y bienestar. Es la recomendación que nos llega desde la Red Europea del Corazón que ha querido alertar a la población de la prevalencia, cada vez mayor, de problemas cardiovasculares. Infartos, trastornos vasculares o accidentes cerebrovasculares, entre otros trastornos de salud motivados, en gran medida, por una dieta desequilibrada y por la falta de actividad física.
El último informe sobre régimen alimentario, actividad física y prevención de las enfermedades cardiovasculares constata la relación entre la salud de nuestro corazón y los alimentos que comemos. Seguir una dieta sana y equilibrada, combinada con la práctica de actividad física, son las dos premisas básicas de la Red Europea del Corazón para prevenir los problemas de salud y que constituyen la primera causa de muerte en los países europeos (infartos, patologías vasculares o accidentes cerebrovasculares, entre otros). Un problema sanitario, tal y como señalan los expertos, que requiere una intervención rápida y contundente, como en el caso del tabaco y los serios riesgos que puede conllevar para nuestra salud.
En la salud de nuestro corazón la dieta juega un papel fundamental ya que, entre otros beneficios, ayuda a mantener los niveles óptimos de colesterol. Una dieta sana y equilibrada, como la dieta mediterránea.
Recomendaciones para tener una adecuada salud cardiovascular
Las recomendaciones de la Red Europea del Corazón también hacen hincapié en:
- Controlar el consumo de sal
- Evitar los alimentos con exceso de grasa saturada.
- Reducir la ingesta de bebidas azucaradas.
- La fruta y la verdura siguen siendo la asignatura pendiente de los europeos. Lo aconsejable son tomar cinco piezas de frutas y verduras al día.
- En nuestra dieta deben primar alimentos como cereales, pasta, arroz, frutos secos, pescado (el pescado azul es rico en ácidos omega-3) y, por supuesto, aceite de oliva, entre otros.
- La Organización Mundial de la Salud también advierte de los riesgos del sedentarismo. Dos tercios de la población reconocen no practicar ejercicio físico, lo cual, de entrada, no es bueno para nuestro corazón. Al menos, se debe pasear una media hora al día.
Los especialistas en nutrición alertan de que, pese a que conocemos la teoría sobre los beneficios de llevar una dieta sana para evitar problemas cada vez más frecuentes como la obesidad, los menús poco equilibrados siguen siendo una de las principales causas de desarrollar problemas de corazón.
Administraciones públicas: cómo fomentar una mejor salud cardiovascular
No sólo las recomendaciones están dirigidas a la población en general, sino que la Red Europea del Corazón también se dirige a las administraciones públicas, profesionales de la medicina y del corazón, así como a la industria alimentaria. En concreto, las medidas propuestas son:
- Reducir la dosis de sal, azúcar y grasas saturadas de los productos que se venden, así como el tamaño de las porciones.
- Eliminar las grasas ‘trans’.
- Modificar el etiquetado de los productos alimentarios incluyendo toda la información sobre la calidad nutricional.
- Mayor control de la publicidad de alimentos dirigida a los menores.
- Concienciar y educar sobre la importancia de una dieta equilibrada tanto en colegios, guarderías como en centros de trabajo.
- Fomentar los beneficios de la lactancia materna.
- Encarecer los precios de los productos o alimentos menos saludables.
La Red Europea del Corazón, integrada por fundaciones de todo el mundo, trabaja en la prevención de los riesgos de desarrollar una enfermedad cardiovascular incidiendo en la formación y la información.
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