Riesgo cardiovascular: Vigila tus triglicéridos. Entre el 5 y el 10% de las mujeres presenta unos niveles altos de triglicéridos, según datos de la Sociedad Española de Arteriosclerosis, uno de los principales factores de riesgo de padecer un trastorno cardiovascular, desde un infarto de miocardio a una angina de pecho. Prevenir y proteger nuestra salud cardiovascular empieza por incorporar a nuestro estilo de vida unos hábitos saludables, tales como una alimentación equilibrada con reducción de grasas y evitar el consumo de tabaco y de alcohol.
¿Tienes los triglicéridos altos? La importancia de vigilar los niveles de triglicéridos (tipo de grasa que almacena nuestro organismo) está directamente relacionada con nuestra salud cardiovascular. En niveles óptimos, son indispensables como fuente de energía, pero si estos son demasiado elevados, tendremos mayor riesgo de sufrir arteroesclerosis, desencadenante del infarto o la angina de pecho. Según datos médicos, se calcula que entre el 5 y el 10% de las mujeres tiene unos niveles de triglicéridos altos, un porcentaje que en el caso de los hombres es aún mayor (entre el 10 y el 15%). Una alimentación rica en grasas y alimentos azucarados, el consumo excesivo de alcohol, el tabaco, incluso las comidas copiosas o el padecer otros trastornos como diabetes u obesidad, son los principales factores de riesgo que ponen en peligro nuestra salud cardiovascular. Los médicos también apuntan a que una de las señales que nos advierte de que podemos tener un problema de triglicéridos es el perímetro de la zona abdominal. Por supuesto, los antecedentes familiares también nos hacen más vulnerables a padecer trigliceridemia (niveles superiores al valor normal situado en 150 mg/dL). Un dato a tener en cuenta: Según la Fundación Española del Corazón y la Sociedad Española de Cardiología, una nutrición equilibrada y unos hábitos saludables (incluido el dejar de fumar) pueden evitar hasta el 80% de los infartos de miocardio, la patología más frecuente del corazón, al reducir considerablemente los niveles de hipertensión, colesterol y de triglicéridos.
Además de consultar a nuestro médico para determinar las causas de los niveles altos (con un simple análisis de sangre) y prescribir el tratamiento más correcto, hay una serie de consejos saludables que debemos tomar para equilibrar nuestros triglicéridos y evitar consecuencias más severas. Lo primero de todo, revisar nuestra dieta y reducir los alimentos con grasas saturadas (mantequilla, carnes grasas) y sustituirlos por alimentos ricos en ácidos grasos poliinsasturados (especialmente ácidos grasos Omega 3 presentes en los pescados azules, o en las nueces), así como los alimentos o productos con demasiados azúcares (bebidas y refrescos); realizar ejercicio físico, evitar el consumo de alcohol y de tabaco y evitar los kilos de más. El sobrepeso o la obesidad es un problema que cada vez preocupa más a los expertos en salud, siendo uno de los principales factores de riesgo de nuestra salud cardiovascular. Por su parte, si padecemos diabetes, debemos contar con un diagnóstico para su correcto control, porque no hay que olvidar, como subrayan los médicos, que en este caso el principal problema es no estar diagnosticado.
En cuestión de alimentación, para mantener a raya nuestros triglicéridos, otros buenos aliados los encontraremos en las frutas y verduras, alimentos naturales ricos en fibra y antioxidantes. Las legumbres, por su parte, nos aportan hidratos de carbono, fibra soluble y proteínas vegetales.