Perder peso: Comer antes de las 3, ¿adelgaza más? Somos lo que comemos y cuándo lo comemos. Y es precisamente en la hora de la comida, aseguran los autores de un estudio, en el que han participado investigadores españoles, donde nos jugamos gran parte de las opciones de conseguir que una dieta de adelgazamiento sea lo más eficaz posible. Así, aquellos que comen antes de las 3 de la tarde tienen más posibilidades de adelgazar. ¿Dónde está la clave?
¿A qué hora comes? La pregunta no es trivial, ya que atendiendo a los resultados del estudio llevado a cabo por la Universidad de Murcia y las universidades estadounidenses de Harvard y Tufts –publicado en International Journal of Obesity- , la hora de la comida influye de manera directa en la pérdida de peso. Así, comer antes de las 3 de la tarde resulta más efectivo para adelgazar que hacerlo después de esa hora.
Para llegar a esta conclusión, los autores del estudio contaron con la participación de 420 personas con problemas de sobrepeso, las cuales se sometieron durante un periodo de 20 semanas a un tratamiento para adelgazar basado en la dieta mediterránea. Los participantes fueron divididos en dos grupos. El primero de ellos comía temprano y el segundo tarde. Hay que subrayar que en la comida del mediodía ingerimos el 40% de las calorías diarias. Los investigadores también analizaron si la cena o el desayuno tenían influencia.
Lo que constataron los investigadores fue que aquellos pacientes que comían tarde eran los que perdían menos peso. En este caso además, coincidía que la mayoría ingería menos calorías en el desayuno o, incluso, se lo saltaba. Hay que recordar que saltarse una comida puede desequilibrar la dieta. Así, por ejemplo, si nos saltamos el desayuno llegaremos con más hambre a la siguiente comida e, incluso, será más fácil caer en la tentación del picoteo.
La dieta juega un papel fundamental a la hora de perder peso, y también a la hora de mantenerlo. Una dieta que nos ayude a adelgazar debe ir incluso más allá, incluyendo el promover hábitos de vida saludables. Hábitos que incluyen el planificar los menús, el controlar la ingesta de calorías –adaptándolas al gasto energético de cada persona- y, sobre todo, el llevar un horario de comidas.
Pero no hay que olvidar, como señalan los autores de este estudio que indaga un poco más en cómo influye el horario de las comidas en nuestro organismo y, en concreto en el metabolismo, que hay otros factores a tener en cuenta a la hora de perder peso. Entre ellos también apuntan a las hormonas del apetito y a la duración del sueño. En este estudio en concreto, estos factores fueron semejantes en ambos grupos de participantes. No obstante, esto sí llevo a otra conclusión, y es que resultó que los comedores tardíos son más nocturnos, al tiempo que presentan con mayor frecuencia, tal y como aseguran los investigadores, una variante genética del denominado gen Clock, responsable de codificar la proteína encargada del reloj circadiano, es decir, el reloj que marca los horarios del organismo.
