Gazpacho: Fuente de productos saludables. Apostar por el rojo es una apuesta segura, máxime en este caso que tiene al tomate como ingrediente estrella. Pero la principal ventaja de este plato, veraniego por excelencia por ser refrescante e hidratante, aunque no descartable en cualquier otra época del año precisamente por sus beneficios y propiedades, es que combina diferentes variedades de hortalizas y verduras, esenciales en una dieta sana, variada y equilibrada. Descubre por qué los tomates y el gazpacho son los reyes de los platos fríos.
Refrescante e hidratante. Dos virtudes que hacen del gazpacho uno de los platos que no pueden faltar en nuestro menú cuando suben las temperaturas. Plato frío y veraniego, en cada cucharada estamos aportando nutrientes esenciales en nuestro organismo. Y no solo el gazpacho casero, también el gazpacho comercial, conservado en la nevera hasta tres meses, preserva sus efectos antioxidantes, tal y como ha constatado la Universidad de Barcelona, en concreto el grupo de investigación en antioxidantes naturales.
El tomate es el ingrediente estrella, una fuente esencial de polifenoles, pero no es el único, ya que un buen gazpacho es la combinación de hortalizas y vegetales (pepino, ajo, cebolla, pimiento…), aderezado con un chorrito de aceite de oliva, otro básico de toda dieta que se precie de sana y equilibrada. Los polifenos son compuestos que se encuentran en los vegetales, antioxidantes naturales que tienen reconocidos beneficios para nuestra salud cardiovascular y para la prevención de los trastornos relacionados con el envejecimiento, al tiempo que reducen los riesgos de desarrollar algunos tipos de cánceres. No solo se encuentran en los tomates naturales, también en los zumos de tomates.
Tal y como aconsejan los especialistas en nutrición, aunque podemos recurrir a los suplementos de polifenoles para complementar nuestra dieta, es mejor obtenerlos directamente de los alimentos naturales, ya que se potencian sus beneficios, los cuales repercuten directamente en el buen funcionamiento de nuestro metabolismo.
Además de estos antioxidantes, los tomates también son una fuente de licopenos y otros carotenos, así como de vitamina C. Un buen gazpacho, en sus diferentes variedades, nos reportará minerales (hierro, calcio, fósforo, potasio y sodio, entre otros), vitaminas (A, C y E), fibra e hidratos de carbono.
Gazpacho: Variedades
Existen múltiples variedades de gazpacho (andaluz, salmorejo, extremeño, ajoblanco, entre otros), aunque la más tradicional es la combinación de tomates maduros, pimientos rojos y verdes, cebolla, ajo, pepino, pan sin corteza, aceite de oliva, vinagre, sal y agua. Es un plato frío, rico en nutrientes y un acompañante ideal para los platos únicos si queremos un menú ligero pero equilibrado. Se puede combinar de otros aderezos, como jamón, huevo duro o manzana. Además de saciante, el gazpacho es bajo en calorías, por lo que es ideal para tomar a cualquier edad y en cualquier momento como bebida refrescante e hidratante, por su composición de sales.
