Espinacas para controlar la presión arterial. A las propiedades nutritivas ya reconocidas de las espinacas, como vigorizar nuestros músculos, se suma ahora otra propiedad no menos interesante para nuestra salud. Y es que, según el último estudio médico publicado, una ración de espinacas en nuestra dieta ayuda a controlar la presión arterial alta. No se trata de un sustituto del tratamiento en el caso de pacientes que sufren hipertesión, pero sí de un aliado para ayudar a la prevención de problemas de nuestro sistema vascular.
Como ya sabemos, una alimentación sana y equilibrada, acompañada de unos hábitos saludables, son la mejor manera de prevenir problemas de salud y, en concreto, problemas cardiovasculares. Alimentación en la que, tal y como recomienda el último estudio de investigación realizado por el Instituto Karolinska de Estocolmo (Suecia), es aconsejable incluir las espinacas, ya que gracias a los nitratos orgánicos presentes en este tipo de verduras, se han convertido en un aliado para prevenir y controlar la presión arterial. Se da la circunstancia de que este óxido nítrico producido por los nitratos cuando entran en contacto con las bacterias bucales, como se comprobó en el estudio con pacientes, actúa como un vasodilatador para abrir las arterias, justo lo contrario de lo que hasta ahora se había pensado. En concreto, los pacientes que participaron en este estudio no presentaban problemas arteriales, si bien, tras comer un plato de espinacas tres veces a la semana, su presión arterial descendió de manera notable. Las espinacas, hay que recordar, que es un alimento rico en vitaminas y antioxidantes, hidratos de carbono, minerales y fibra. De bajo contenido en grasa y compuestas por sobre todo por agua, en cuanto a los minerales hay que destacar el hierro, calcio, sodio, magnesio y yodo.
Una recomendación, avalada por los resultados de este estudio, a la que se suman los cardiólogos a través de la Sociedad Española de Cardiología y la Federación Española del Corazón. El consumo de verduras y frutas está especialmente recomendado en una dieta saludable, demostrándose ahora que incluir en nuestro menú semanal el consumo de espinacas es bueno para mantener a raya los riesgos de sufrir una enfermedad cardiovascular. Lógicamente, todo ello debe ir acompañado de una serie de hábitos saludables, como el no fumar o practicar alguna actividad física, ya que el sedentarismo y una dieta desequilibrada son los peores enemigos de nuestro bienestar y salud física.