Perder peso y lucir un vientre plano, todo en uno, gracias a una dieta hidratante, depurativa y baja en calorías que te ayudará a adelgazar en poco tiempo. En tan solo siete días, el tiempo establecido para esta dieta, notarás los primeros efectos. Gana la batalla a la báscula y luce cintura sin complejos. ¿Te apuntas?
Conseguir un vientre plano y reducir centímetros en la cintura no siempre es fácil, no en vano es una de las zonas corporales más rebeldes cuando se trata de perder los kilos de más. Pero tenemos la solución, una dieta adaptada a nuestras necesidades para recuperar nuestra silueta y lucir palmito. Si quieres lucir un vientre plano en poco tiempo, solo tienes que seguir las indicaciones de una dieta baja en calorías, pero con todos los nutrientes necesarios. Y para completar los efectos, no olvides que el ejercicio físico es un aliado de primera. Algunos ejercicios tan sencillos, como andar o saltar a la cuerda, te ayudan a ponerte en forma y a perder calorías. También puedes recurrir a los ejercicios específicos para tonificar las zonas más rebeldes, incluido el vientre.
Dieta vientre plano en una semana
A continuación, vamos a ver, día a día, la dieta para conseguir nuestro objetivo de perder peso y bajar barriga, zona donde más se acumula la grasa y la retención de líquidos:
- Lunes. Desayuno: Zumo de fruta y dos rebanadas de pan integral con una cucharadita de miel. Comida: verduras al vapor o crudas, arroz integral con marisco (mejillones, almejas, calamar) y tomate fresco; té o café. Merienda: Una pieza de fruta. Cena: Ensalada mixta con queso y pan de grano entero (puedes acompañarlo con una cucharada de aceite, sin sal, y con especias).
- Martes. Desayuno: Zumo de fruta y dos rebanadas de pan integral. Comida: verduras al vapor o verduras crudas, con pescado a la plancha (pez espada) y un poco de orégano. Merienda: una pieza de fruta. Cena: ensalada mixta con queso o atún al natural y pan de trigo integral (puedes acompañarlo de una cucharadita de aceite de oliva virgen y especias).
- Miércoles. Desayuno: Zumo de fruta y dos rebanadas de pan integral con una cucharadita de miel. Comida: plato de verduras al vapor o crudas, jamón con melón (3 rebanadas). Merienda: un yogur desnatado con frutas. Cena: arroz hervido (60 gramos) con salsa de tomate y cocinado con un poco de aceite y ajo (sin sal, solo con pimienta).
- Jueves. Desayuno: Zumo de frutas con dos rebanadas de pan integral. Comida: verduras al vapor o crudas y risotto con sabor a verduras frescas. Merienda: un yogur bajo en calorías con frutas (125 gramos). Cena: pechuga de pollo a la plancha, ensalada de tomate y pan (50 gramos). No hay que olvidar que, contrariamente a lo que pensamos, el pan no engorda, y es esencial en la dieta por sus propiedades nutritivas.
- Viernes. Desayuno: zumo de frutas y dos rebanadas de pan integral con una cucharadita de miel. Comida: pasta con aceite de oliva, ajo y guindilla. Merienda: fruta fresca. Cena: una rodaja de atún al natural, cocinada al vapor o a la plancha, con una ensalada mixta.
- Sábado y domingo: Desayuno: café o té con tres galletas integrales o pan con mermelada. Comida: pescado cocinado al horno (con tomates, por ejemplo). Merienda: granizado o zumo de frutas. Cena: pasta con tomate y verduras frescas.
Es importante cuidar la hidratación, y especialmente cuando estamos a dieta. En este caso, y durante estos siete días, conviene beber al menos un litro de agua y un litro de té o hierbas drenantes. En este punto, la fitoterapia nos aporta interesantes soluciones naturales para depurar nuestro organismo y, al mismo tiempo, ayudarnos a adelgazar.
