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¿Sigues una dieta equilibrada? Comer sano significa incluir en la dieta diaria todos los nutrientes esenciales (vitaminas, minerales…), sin renunciar a las propiedades de alimentos básicos como las frutas, verduras, pescado, carne o lácteos. Una dieta sana, variada y equilibrada es el mejor escudo protector frente a las enfermedades y trastornos de salud, muchos de ellos relacionados con la deficiencia de vitaminas y otros nutrientes. Si quieres mejorar tu dieta, toma nota de estos 10 consejos que te lo pondrán mucho más fácil. [/multipage]
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1. Reemplazar las proteínas
Las proteínas son uno de los nutrientes esenciales de una dieta equilibrada, pero además de las proteínas animales también están las vegetales, de alta calidad nutricional. Una dieta demasiado rica en carne también puede aumentar la ingesta de grasas. [/multipage]
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2. Lácteos en su justa medida
Es mejor tomarlos desnatados, para evitar tomar demasiadas grasas. Los lácteos nos aportan nutrientes esenciales como el calcio, pero al igual que el resto de alimentos deben estar de manera equilibrada en nuestra dieta. Tomar un cuenco de leche con cereales es la mejor manera de empezar el día con buen pie. [/multipage]
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3. Evitar eliminar alimentos
Cuando eliminamos un alimento de la dieta también obviamos sus propiedades. Ningún alimento es malo en sí, sino que el problema radica en su consumo excesivo. Una dieta sana es aquella que también es variada y equilibrada, la cual debemos compaginar con la práctica regular de ejercicio físico. [/multipage]
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4. Dieta unisex, ¿sí o no?
La dieta debe ajustarse a las necesidades de cada persona. Las diferencias físicas y biológicas entre hombres y mujeres hacen que cada uno requiera un tipo de dieta. Es decir, si vamos a empezar una dieta antes de seguir la que hace un amigo/a lo mejor es consultar a un dietista. [/multipage]
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5. Desayuno
Comenzar el día con un desayuno saludable es uno de los secretos de la dieta. Es una de las comidas esenciales y que no debemos saltarnos, porque es básica para recargar la energía después de dormir. Saltarse el desayuno solo hará que el apetito sea incontrolable y, por tanto, engordemos más. [/multipage]
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6. Beber agua
Lo recomendable es tomar entre 8-10 vasos de agua al día. La hidratación es fundamental para todas las células del cuerpo, ayudando a eliminar las toxinas y a prevenir el envejecimiento prematuro. El agua, además, tiene cero calorías. Otra manera de aumentar la ingesta de líquidos es tomando zumos naturales o infusiones de hierbas. [/multipage]
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7. Tipos de agua
¿Es mejor el agua embotellada que el agua del grifo? La respuesta es que ambas pueden ser igual de buenas, ya que el agua del grifo también se trata para que sea potable y esté libre de contaminación bacteriana. Sí es cierto que entre las aguas embotelladas encontramos muchas más variedades. [/multipage]
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8. Somos lo que comemos
Cuidar tu cuerpo está en tus manos. La dieta mediterránea sigue la máxima de que somos lo que comemos, por lo que hay que apostar por los alimentos más naturales, como las frutas y verduras. Evitar los fritos y los alimentos grasos ayuda a prevenir los trastornos digestivos, entre otros. [/multipage]
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9. Ayunar, ¿sí o no?
Aunque el ayuno cuenta con sus defensores, lo cierto es que dejar de comer no es saludable y mucho menos es la solución para evitar engordar. Una dieta sana y equilibrada es incompatible con el ayuno. Llevar una dieta equilibrada es esencial para cuidar la salud y el peso. [/multipage]
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10. Frutas y verduras
Lo aconsejable es tomar entre 5-7 piezas de frutas y verduras al día. La fruta es ideal para cualquier momento del día, mientras que la verdura debe estar presente en las comidas principales (como guarnición o como primer plato). Ambas se pueden tomar como zumos naturales. Ricas en nutrientes, bajas en calorías, ayudan a adelgazar. [/multipage]