Boda Real en Luxemburgo: enlace civil y cena de gala [FOTOS]

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Boda Real en Luxemburgo: enlace civil y cena de gala. Guillermo de Luxemburgo y Stéphanie de Lannoy ya son marido y mujer después de la boda civil celebrada ayer en el Ayuntamiento de la capital luxemburguesa, donde sólo asistieron los familiares más cercanos y los recién casados se dieron un baño de multitudes antes y después de entrar a este edificio. Las celebraciones no terminaron ahí, puesto que por la noche se congregaron las monarquías de toda Europa para la cena de gala y hoy será el enlace religioso donde podremos ver a los Príncipes de Asturias como representantes de la Casa Real Española.

Una de las últimas bodas reales de un heredero europeo tiene lugar este fin de semana en el que Luxemburgo va a ser el centro de todas las miradas, ya que Guillermo de Luxemburgo y Stéphanie de Lannoy se han compartido en marido y mujer.
 
En una celebración que se alarga todo el fin de semana, comenzó ayer con la boda civil en el Ayuntamiento de la capital luxemburguesa, tras la cual, las principales monarquías europeas, a excepción de la española que viajará hoy al enlace religioso, asistieron a una cena de gala en el Palacio Gran Ducal.
 
Así que vamos a repasar por partes como ha sido este primer día de celebraciones en el pequeño país europeo, tras el cual Guillermo de Luxemburgo y Stéphanie de Lannoy ya son marido y mujer, al menos civilmente:

Boda Civil:

Sobre las 15:20 horas de la tarde, Guillermo de Luxemburgo y Stéphanie de Lannoy abandonaban el Palacio Gran Ducal para recorrer a pie los escasos pasos que les separaban del Ayuntamiento de la capital en cuyo Salón de Plenos se iba a celebrar su enlace civil ante la mirada de sus familiares más allegados.
 
El camino hacia el Ayuntamiento se alargó porque la pareja no dejó de saludar a los miles de luxemburgueses allí reunidos que no querían perderse este día en el que su país es el centro de la realeza europea, aunque el coste para el Estado de estas bodas suele ser bastante elevado.
 
De esta manera, pudimos apreciar el modelo que ha elegido para esta primera celebración la Condesa, un traje tweed de la firma Chanel en color marfil, con zapatos y bolso plateados, con la melena suelta pero recogiendo la parte delantera con un bonito broche.
 
Los recién casados han estado acompañados en esta ceremonia por el Gran Duque Enrique de Luxemburgo junto a su esposa, la Gran Duquesa María Teresa que para esta ocasión ha elegido un precioso modelo de Elie Saab. Tampoco han faltado a esta celebración el príncipe Félix, el príncipe Luis de Luxemburgo y su esposa, Tessy, con un diseño de Ralph Lauren, la princesa Alejandra, que se ha decantado por Dior, y el príncipe Sebastián.
 
Tras la emotiva celebración, el Gran Duque heredero y la ya convertida en princesa de Luxemburgo, han abandonado el Ayuntamiento para darse un nuevo baño de multitudes, donde los ciudadanos luxemburgueses les esperando con banderitas de su país. Según se ha cifrado, unas 2.500 personas se reunieron en la plaza Guillermo II, donde los Príncipes han permanecido cerca de media hora saludando y recibiendo presentes, antes de volver al Palacio Gran Ducal donde a las 20:00h. tenía lugar al cena de gala.

Cena de Gala:

Tan sólo tres horas después del enlace civil, el Palacio Gran Ducal de Luxemburgo se vestía de gala para recibir a los invitados a esta cena, previa al enlace religioso que tendrá lugar a las 11:00h. Allí se han reunido representantes de las principales casas reales europeas y de otros puntos geográficos como Marruecos, Japón o Jordania, pero sin la presencia de los Príncipes de Asturias que sí acudirán hoy a la ceremonia religiosa, después de haber cumplido con sus agendas que esta semana les ha llevado, entre otros actos, a inaugurar la Casa del Lector en Madrid.
 
Para esta especial ocasión, la ya Princesa Stéphanie ha elegido un vestido de Elie Saab, el mismo diseñador del vestido que lucía su suegra en la ceremonia civil, sólo que el de la novia era en plateado, lleno de pedrería y con escote en forma de abanico. Además, lucía una tiara belga con diamantes en espiral.
 
Minutos antes de recibir a los invitados, estos han ido desfilando a la entrada del Palacio Gran Ducal, ellos vestidos de frac y ellas con sus mejores galas y saludando a la prensa y al público allí presente.
 
Entre ellos no podían faltar Guillermo y Máxima de Holanda, ella con un vestido de brillos en blanco y burdeos palabra de honor, con estola de pelo a juego. La princesa Lalla Salma de Marruecos ha sido una de las primeras en llegar sin su marido, el rey Mohamed VI que tampoco acudirá hoy a la ceremonia religiosa.
 
Haakon y Mette-Marit de Noruega llegaron de la mano a este enlace, ella decantándose por un vestido rojo con escote cerrado y también con bastante pedrería. Entre los invitados no esperados estaba la Reina Fabiola de Bélgica, que por su delicado estado de salud no se esperaba que acudiera a esta celebración, pero no se ha querido perder esta cena de gala.
 
Como siempre, Carolina de Mónaco, en representación de su familia, fue una de las más elegantes de la cena de gala, con un precioso vestido negro y plateado con un original escote y que sólo ella sabe lucir.
 
Pero la Princesa Marie Chantal, que acudió junto a su esposo el Príncipe Pablo, la hizo sombra entre las más elegantes de la noche con un precioso vestido nude con pedrería en dorada impresionante.
 
Mientras los rumores apuntan a que su hermana Magdalena de Suecia podría estar embarazada, Victoria de Suecia acudió a esta cena de gala con un vestido rosa de strass y escote en la espalda, acompañado de un discreta tiara.
 
Todo esto ha dado de sí el primer día de celebraciones en Luxemburgo de la boda del Príncipe Heredero Guillermo y su ya esposa, la Princesa Stéphanie, que hoy se darán el sí quiero en una multitudinaria celebración religiosa.

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