Cada vez son más parejas las que deciden celebrar una boda en la playa, porque son muy románticas, el paisaje es espectacular, aportan una atmósfera única a las bodas y, lo mejor, permiten que tanto la pareja como los invitados se tomen unos maravillosos días de vacaciones. Sin embargo, es importante conocer bien los meses adecuados en los que es mejor casarse, para no encontrarse con sorpresas climatológicas o de otro tipo que puedan echar por tierra la boda. Para elegir los meses mejores para casaros en la playa, deberéis tener en cuenta algunos aspectos básicos. Te los contamos en EllaHoy.
1. Elegir los meses para casarse según el destino de playa
No es lo mismo casarse en una playa española que en una playa paradisíaca. Sobretodo porque el clima es muy diferente, por lo que deberéis aseguraros en qué mes hay mejor clima en la playa que deseáis casaros. Además, el tipo de mar también es importante, pues las mareas varían en función de la temporada.
Lo ideal es que os aseguréis bien a partir de diferentes fuentes sobre qué meses son los mejores para casarse en esa localización de playa. No os fiéis únicamente de la agencia de viajes o la empresa organizadora de bodas, porque pueden evitar algunos asuntos para conseguir la contratación. Si conocéis a alguien del lugar, preguntad. Si podéis investigar en Internet, hacedlo. Aseguraos con varias personas antes de tomar la decisión del mes en que queréis casaros.
Clima en diferentes destinos de playa
Por ejemplo, si queréis casaros en una playa del caribe mexicano, como en la Rivera Maya, debes saber que en zonas tropicales por lo general existen dos estaciones, estación de lluvia y estación seca. Por ello, en las playas mexicanas, el mes ideal es noviembre, pues todavía no hace mucho calor y ya no llueve y en general los meses de diciembre a abril.
Sin embargo, si elegís un destino situado en el hemisferio sur, como los países de América del Sur, deberás tener en cuenta que el invierno y el verano cambian con respecto al hemisferio norte, es decir, cuando en España es verano en Sudamérica es invierno y por lo general hace frío.
Mar en diferentes destinos de playa
Los océanos y mares y sus movimientos también son importantes a la hora de elegir los meses para casarse. Un ejemplo: si vuestra localización está ubicada en el Océano Pacífico, es importante de que os enteréis en qué meses hay “mar de fondo”, un fenómeno natural que provoca fuertes olas y arrastra materia orgánica del mar. En cada país se produce en una época diferente y debéis informaros para aseguraros de que pasaréis unos lindos días en la playa. Otro ejemplo es la “marea roja”, un fenómeno natural del Océano Pacífico que arrastra saxitocina a las costas, convirtiendo el agua en tóxica e impidiendo poderse bañar en el mar.
2. Boda en la playa: evitad las temporadas turísticas
Si no quieres casarte con cientos de personas no conocidas mirando alrededor, lo mejor es que evites temporadas vacacionales del destino al que acudirás. En general, evita Semana Santa, pues si deseas casarte por la Iglesia, es muy probable que no encontréis ninguna que oficie bodas en estas fechas y porque es una época de afluencia de turistas en casi todo el mundo. También, enteraos de las festividades nacionales, para que no coincidan con vuestra boda. Casarse un día en que está todo cerrado puede llegar a ser un fiasco.
3. No elijáis los meses de mayor calor para casaros
En una boda en la playa se espera que haga calorcito, pero un calor sofocante puede destrozar el gran día. Imagínate caminando hacia el altar de boda en la playa con tu increíble vestido mientras sudas la gota gorda. Deberéis informaros sobre la temperatura que hará el mes en que deseáis casaros y la humedad relativa, también muy importante para la sensación de calor. Si en el destino que habéis elegido hace un calor sofocante, busca otro mes más adecuado. Si no hay opción, tratad de celebrar la boda al final de la tarde o en la noche, para que los invitados y vosotros no sintáis tanto calor.
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