A veces nos obsesionamos tanto con la idea de conseguir el maquillaje perfecto que olvidamos lo importante que es cuidar de nuestro rostro para que la piel no sufra. Y es que no hay nada más bonito que una piel hidratada y cuidada cada vez que decidamos no utilizar ningún producto. Te contamos qué debes hacer antes de aplicar la base de maquillaje para que tu piel quede intacta.
Limpia tu rostro
Muchos factores externos como la contaminación de los coches o la intensidad del sol hacen necesario que procures mantener tu rostro libre de residuos para no obstruir los poros con el maquillaje que vayas a aplicar más adelante. Para ello, echa un poco de gel limpiador en una gasa estéril y aplícalo directamente sobre la cara y el cuello en movimientos circulares. No es necesario que lo hagas con demasiada fuerza, ya que el gel se encarga de eliminar toda la suciedad que puedas tener. Por supuesto, si ya tienes algún tipo de maquillaje anterior deberás aplicar un desmaquillante antes del gel.
Por último, aplicar un poco de leche limpiadora también te ayudará a limpiar y dará una luminosidad muy natural a tu rostro.
Tonifícalo
Tonificar también es importante, ya que conseguirás sentir una limpieza y frescor más profundos. Utiliza un tónico equilibrante para eliminar las pocas impurezas que puedan quedar y mantener a raya la grasa.
Hidrátalo y protégelo
Hidratar será el último paso indispensable para preparar tu piel antes del maquillaje. Puedes utilizar una crema hidratante o un tónico, pero siempre buscando aquellos productos que tengan añadida una protección solar. En caso de no tenerla, es muy importante que añadas sobre esta crema o tónico un protector solar. Esto evitará que los rayos solares alcancen tu rostro y causen la aparición de manchas o provoquen un envejecimiento precoz de tu piel. Una vez lo haya absorbido la piel, ya tendrás la piel preparada para aplicar el maquillaje que más te favorezca.