Son muchos los mitos y creencias que oscilan en torno a la piedra de alumbre, un desodorante natural que se ha convertido en la opción para muchas personas en la actualidad. Se trata de una sal doble de aluminio y potasio: aluminio potásico (potasium alum) cuya composición lo diferencia del resto de desodorantes convencionales, hechos a base de clorhidrato de aluminio.
La cuestión se plantea aquí. Cuando buscamos desodorantes huimos de aquellos que lleven demasiados ingredientes químicos. Además, también queremos que nos de resultados efectivos y eso, puede llegar a convertirse en un reto. Al sudar se eliminan toxinas y se controla la temperatura corporal. Ante esto la piedra de alumbre se presenta como alternativa natural… ¿es así?
El funcionamiento de la piedra de alumbre es bastante sencillo. Este mineral se mantiene neutro en seco. En el momento en el que entra en contacto con el agua o la piel húmeda el alumbre se disuelve. Es en ese instante cuando libera iones de aluminio que van a encargarse de obstruir los poros logrando así el efecto esperado de un antitranspirante.
El sistema de este producto es similar al de un desodorante convencional con sales de aluminio. La diferencia la marca la efectividad: las piedras de alumbre solo reducen la transpiración un 30%, siendo lo normal una reducción del 50% con otros desodorantes. Aunque sirven para controlar el olor, no consiguen eliminarlo del todo. Y si tu fin es huir del aluminio, esta no será la mejor solución.
¿Existe un riesgo al usar desodorantes con aluminio?
La OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) ha aclarado que no hay datos contundentes que relacionen el aluminio con el cáncer de mama o con el Alzheimer. Circulan bulos al respecto, pero no hay datos que prueben nada. El Scientific Committee on Consumer Safety (SCCS) ha emitido una opinión sobre la seguridad del aluminio en cosméticos, pero la falta de estudios concluyentes sobre la penetración o absorción del aluminio en la piel ha dejado que la última decisión recaiga sobre el fabricante. Estos serán los que decidan los usos adecuados y recomendables adaptados a cada producto.
En cualquier caso, para evitar problemas se recomienda:
– Aplicar el antitranspirante por la mañana, sobre la piel limpia.
– Retirar los restos del mismo lavándote las axilas y así no tener los poros obstruidos demasiado tiempo.
– Evitar usar desodorantes en la piel recién depilada o irritada.
– Evitar desodorantes con alcohol puesto que éste es irritante.
– Si quieres un desodorante libre de aluminio escoge aquellos productos sin efecto antitranspirante.
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