Laser: Solución para algunos trastornos de la piel. El láser es una tecnología de la que no paran de descubrir aplicaciones para solucionar problemas de salud y de belleza. Se terminaron las cicatrices y las molestas operaciones. La tecnología del laser permite acceder a lugares donde antes no se podía sin dejar marca y eliminar el problema. Actualmente, la solución más efectiva para los trastornos de la piel, como pueden ser las arrugas, las verrugas o el acné pasa por el uso de esta técnica, que permite unos resultados mucho mejores sin apenas marca, lo que adquiere especial importancia cuando se trata de zonas tan visibles como el rostro, las manos o los brazos.
Los problemas de la piel son muy delicados de tratar en lo que se refiere a operaciones u otros tratamientos, ya que nuestra piel es uno de los órganos más sensibles del cuerpo, lo que dificulta enormemente su curación. El laser permite acceder a las zonas más conflictivas con menos esfuerzo y, sobre todo, causando menos daño en la piel, por lo que sus efectos secundarios son muy pocos.
Tipos de láser y problemas de la piel
Aparte de eliminar tatuajes, una de las aplicaciones más conocidas de esta tecnología, el láser puede servir para muchas más cosas. Aquí tienes los principales tipos de láseres que se emplean para acabar con los problemas cutáneos y cuáles de estos puedes tratar mediante esta técnica.
- Láser ablativo. Este tipo de técnica se emplea para hacer una exfoliación muy profunda, que es la exigida por las arrugas o las cicatrices muy marcadas y cuya eliminación implique una gran profundización. En este tipo de intervenciones sí que se necesita un tiempo de reposo posterior a la aplicación del láser que oscila entre dos y tres semanas. Además, la acción del láser no es inmediata, sino que puede tardar algunos meses el observar resultados.
- Láser no ablativo. Cuando el problema no requiere tanta profundización, es posible emplear un láser no ablativo. En este caso estamos hablando de trastornos cutáneos como las manchas en la cara, cicatrices, acné y arrugas. El tratamiento se hace en varias sesiones. En este caso no se pone anestesia de ningún tipo y no se necesita unos días de recuperación posterior. Es el que más se utiliza, pero tiene como inconveniente que los resultados con el ablativo en cicatrices y arrugas son mejores.
El láser se ha generalizado en el campo de la depilación, pero ahora también se ha convertido en la solución más demandada para acabar con los problemas de la piel. Si sufres alguno, contempla la cirugía laser como opción, infórmate y no te arrepentirás.