Chocolate: Beneficios para tu pelo. El chocolate ha sido uno de los productos que ha revolucionado la cosmética en los últimos años gracias a sus múltiples propiedades, desconocidas hasta el momento. La chocolaterapia está muy de moda porque hidrata la piel, sirve para combatir la celulitis, proporciona elasticidad y mejora la circulación sanguínea. Pero el chocolate no sólo sirve para cuidar nuestra dermis, sino que también se ha descubierto que es muy beneficioso para nutrir nuestro cabello, especialmente para los secos y dañados, el cacao aportará un aspecto saludable y aterciopelado.
El chocolate es un buen aliado a nivel emocional, ya que nos produce sensación de bienestar, gracias a una sustancia llamada serotonina, que es la hormona responsable de la felicidad y la relajación. Además algunos expertos han asegurado que el chocolate es beneficioso para el corazón.
Aparte de todos estos beneficios, el chocolate se ha puesto de moda en todos los spas, balnearios y centros de estética, con la llamada chocolaterapia, con la que conseguiremos el placer de un tratamiento muy dulce. Consiste en aplicar masajes con chocolate, por la cara o el cuerpo, con lo que conseguiremos que nuestra piel luzca joven e hidratada.
Componentes del cacao
Además de todos estos beneficios, el cacao también sirve para cuidar el cabello. Contiene multitud de componentes:
- Minerales
- Vitamina B1, que cumple la función nutritiva e hidratante, ideal para el pelo y el cuero cabelludo.
- Magnesio, que le aporta efectos antioxidantes que aportan elasticidad al cabello.
- Teobromina, estimulante natural de la circulación que suministra oxígeno a los tejidos del cuero cabelludo.
- Lípidos y proteínas del grano del cacao, que estimulan la elaboración natural del colágeno, con lo que se consigue una hidratación máxima.
Estas mascarillas a base de cacao, son aptas tanto para cabello graso, porque regula la cantidad de sebo, como para cabello seco, porque lo hidrata en profundidad, al aportar los nutrientes necesarios en su justa medida para todos los casos.
Preparación y aplicación
- Se calienta el cacao, que debe ser 100% puro, al baño maría en una cazuela, y sin dejar de remover, se va añadiendo agua poco a poco hasta que se consiga una textura espesa y no gotee.
- Se lava el pelo como siempre y después se aplica la mascarilla como si fuera un tinte, dejándola actuar durante unos 20 minutos. Para sacar el máximo partido a la mascarilla, tendremos que cubrirnos el pelo con un gorro de ducha y aplicar calor con un secador. Así se abrirán los capilares para dejar pasar los nutrientes del cacao. Para que no se nos vayan con el lavado, es recomendable que los 2 últimos minutos apliquemos aire frío para cerrar los poros.
- Acto seguido se debe lavar el pelo normalmente, y enrollarlo en una toalla para que absorba la humedad, pero sin frotar.
El cacao puro potencia los colores oscuros, pero si tienes el pelo claro, no te preocupes, puedes hacerlo con chocolate blanco, que tiene las mismas propiedades, o añadir leche al cacao para rebajar el tono.
Si ya has probado todos los tratamientos para el cabello tradicionales, toma buena nota de las propiedades que te ofrece el chocolate. Pruébalo y notarás los resultados.