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Harper Seven: sigue los pasos de papá en el mundo del fútbol. Sin duda alguna es una de las niñas más mediáticas del mundo, gracias también a la fama de sus padres, pero con fotos e imágenes como las que traemos hoy de Harper Seven, no creemos que necesite más. La pequeña acompañó a su madre a ver un partido de su hermano Romeo y sacó su vena más futbolística, heredada de su padre David Beckham, jugando con un balón rojo que era casi más grande que ella y convirtiéndose en el centro de atención de todos los espectadores y de su madre, Victoria Beckham que estuvo pendiente de ella todo el encuentro.
Cada vez que tenemos nuevas imágenes de Harper Seven Beckham, nos queda más claro por qué ha sido elegido como el bebé con más estilo del Reino Unido. En su última aparición pública, la hemos podido ver con su mamá apoyando a su hermano Romeo en su partido de fútbol.
Con un original peto con lacitos y unas sandalias de dedo sujetas en el tobillo con lazo en el pelo, Harper Seven se convirtió en la auténtica protagonista de este partido de fútbol, donde además la hemos visto sacando su vena más futbolera jugando con un balón.
Lo que parece es que ha esta niña la gusta el deporte, pero también ir de compras con su madre, Victoria Beckham, por Nueva York como veíamos hace unos días. Parece que se encuentra a gusto viendo partidos de fútbol, ya sean de su padre con Los Ángeles Galaxy o apoyando a sus hermanos, Brooklyn, Romeo o Cruz que también ha heredado esta pasión futbolera.
Además, Harper Seven es la princesita de papá, que la llevó a la semana de la moda de Nueva York para ver el desfile de su madre. Esta vez, la que cuidaba de ella era Victoria Beckham, tan estilosa como siempre con un vestido largo negro y la melena suelta que intentó todo lo posible para que la pequeña estuviera quieta en las gradas.
Tras comer algo, Harper Seven empezó a jugar con un balón rojo, que era más grande que ella, hasta que finalizó el partido cuando saltó al terreno de juego y la vimos dando las primeras patadas al esférico. De momento no tiene la clase de su padre con el balón, pero va apuntando maneras, aunque de momento no tiene mucho equilibrio y la cuesta mantenerse en pie y más con un pelota de la mano.
Eso sí, su madre no fue la única que estuvo pendiente de ella, porque su hermano Romeo, una vez que finalizó el encuentro, se deshizo en besos y caricias con su hermana, dejando muy claro quien es la reina de la casa de los Beckham.
Y es que viendo las fotos que traemos en la galería de Harper Seven en este partido, lo cierto es que no nos extraña que sea el centro de atención allá donde va, porque está preciosa.
